jueves, noviembre 12, 2009

La fuente de la vida

lluvia, frío, viento
y a veces algo de nieve

ese era el panorama
del que disfrutamos
hace poco en Praga,
mi chica y yo

errábamos por
calles con aristas kafkianas
y yo iba hundido:
las noticias no eran buenas

durante aquellos paseos
luchaba por no desmoronarme

sólo podía pensar en
algunos versos sueltos
de javier das y de
ana pérez cañamares

no dejaba de imaginar
qué aspecto tendría ella
cuando se quedara sin pelo
y sin fuerzas por la quimio

ella:
me refiero a mi madre,
la que me dio la vida

esta vida que aún sufre,
este corazón hecho jirones
allá, perdido en algún rincón
de las calles grises de Praga.



José Angel Barrueco, Inédito