Atención a esta escritora, Deborah Eisenberg. Muy aplaudida y premiada, no había sido traducida hasta ahora en España. Y llega con su último libro de relatos, El ocaso de los superhéroes. Seis largas historias (casi podíamos llamarlas "novelas cortas") en las que Eisenberg nos apabulla con su sutileza y un gran dominio de la elipsis. Cada relato va cuajando poco a poco en el lector, despacio, y este va recogiendo las breves pinceladas de información importante que ella nos da. Sólo al final podemos componer el mosaico entero. Basta fijarse en uno de los cuentos, que habla de una relación siniestra y tormentosa entre una pareja; en una sola frase recibimos la clave: Yo sólo..., estaba diciendo ella, y lo único que acierta a recordar es su sorpresa, como si acabara de descubrir que el cuerpo de Eli también tenía puños. Eli es el novio de la muchacha. En adelante, sólo se mencionan los moretones; nada más. Eisenberg ha soltado el dato y no volverá a repetir que el tipo la pega.
Mi favorito, sin embargo, es el primero y el que da título al libro: El ocaso de los superhéroes, fiel reflejo del atentado del 11-S y sus consecuencias posteriores (miedo, guerra, caos) y una obra maestra de composición. En Qué Leer tienen un enlace al cuento en pdf. Está completo. Deberíais leerlo y, después, comprar el libro. Merece la pena.
Para completar: artículo de Fresán, la interesante portada americana y un cuento completo en Qué Leer.