Para mí Pacific Rim se divide claramente en dos películas, en dos mitades bien distintas. Está la parte de los humanos, que es la que no me gusta: la que habla de superación, rivalidades, de olvidarse del pasado y afrontar el presente a través de las cicatrices...; y no me gusta o no me entusiasma porque el guión resulta ser muy débil, y porque, salvo dos actores (Idris Elba y Ron Perlman), el resto del reparto no está a la altura (el actor protagonista no tiene mucho carisma, que digamos). Y luego está la parte de los kaiju y los jaeger (es decir: los monstruos y los robots), que, sorprendentemente, resultan ser lo mejorcito de la película y su gran baza; y lo son porque Guillermo del Toro ha rodado las escenas de los combates con una belleza aterradora; ha conseguido darle una plasticidad inusual a las luchas de titanes metidos en el mar y con la lluvia azotando sus cabezas. En conjunto no es su mejor trabajo, desde luego. Pero al menos recupera el espíritu de las matinales de Godzilla y sus antagonistas.
Hace 14 horas