Corolario. Para ser fashionable, hay que disfrutar del descanso sin haber pasado por el trabajo: o sea, haber ganado el gordo de la lotería ser hijo de millonario, príncipe, tener una sinecura, o varias.
**
El artista es una excepción en todo: su ociosidad es un trabajo, y su trabajo un descanso; unas veces es elegante y otras descuidado; cuando le apetece se reviste el blusón del labrador, y decide qué frac deberá llevar el hombre que quiera estar a la moda; él no sigue las modas, las impone.
**
Un pueblo de ricos es un sueño político imposible de realizar. Una nación se compone necesariamente de personas que producen y personas que consumen. ¿Cómo es que quien siembra, planta, riega y cosecha es precisamente el que menos come?
**
No basta con haberse hecho rico o haber nacido rico para llevar una vida elegante: hay que poseer el sentido de la elegancia.
**
Las distinciones se envilecen o mueren cuando se hacen comunes; pero existe un poder encargado de estipular otras nuevas distinciones: nos referimos a la opinión; y la moda no ha sido jamás otra cosa más que la opinión aplicada a la indumentaria.
[Traducción de Lluís Maria Todó]