Un padre ecologista, enfermo y viudo (Day-Lewis) y su hija (Camilla Belle) viven solos en una casa de campo. Jack ha educado a Rose en la convicción de que no necesitan nada del mundo moderno: están aislados, cultivan flores, no tienen televisión, etc. Sin embargo, un día decide llevar a su novia (y a los hijos de ésta) a casa, para que intenten vivir todos juntos. Pero Rose ve aquello como una intrusión y la pérdida de su padre, con quien mantiene una relación tan absorbente que roza lo incestuoso. Jack tendrá que elegir entre su hija o esa nueva vida.
Gran película de Miller y otro admirable trabajo de Day-Lewis, uno de los mejores actores de su generación. Con una potente banda sonora (Clearance Clearwater Revival, John Mayall, Bob Dylan...) y secundarios de lujo como la morbosa Catherine Keener, Jason Lee, Beau Bridges o Jena Malone.
PD: Me queda la duda de si este filme fue estrenado en alguna sala de Madrid. Si es así, el estreno pasó desapercibido y ni siquiera recuerdo haber visto reportajes sobre el mismo en las revistas de cine ni en los periódicos. Si alguien lo sabe, que nos lo aclare.