Imprescindible para entender la evolución del género y los
orígenes de muchas obras. Para mí supone la conexión entre los mundos de Blade Runner & Philip K. Dick, el
ciberespacio, el ciberpunk y Matrix.
De hecho, Matrix (y otras películas y
bastantes libros) es casi un calco de Neuromante,
una influencia absoluta y determinante. William Gibson construye su universo
futurista de neones y realidades paralelas con una prosa magnífica y con un toque
casi poético, de la que os dejo un fragmento:
Ahora dormía en los
ataúdes más baratos, los más cercanos al puerto, bajo los faros de cuarzo
halógeno que iluminaban los muelles toda la noche como vastos escenarios; donde
el fulgor del cielo de televisor impedía ver el cielo de Tokio y aun el
desmesurado logotipo holográfico de la Fuji Electric Company, y la bahía de
Tokio era un espacio negro donde las gaviotas daban vueltas en círculo sobre
cardúmenes de poliestireno blanco a la deriva. Detrás del puerto se extendía la
ciudad, cúpulas de fábricas dominadas por los vastos cubos de arcologías
empresariales. Puerto y ciudad estaban divididos por una estrecha frontera de
calles más viejas, un área sin nombre oficial. Night City, y Ninsei, el corazón
del barrio. De día, los bares de Ninsei estaban cerrados y no se distinguían
unos de otros: el neón apagado, los hologramas inertes, esperando bajo el
envenenado cielo de plata.
[Traducción de José Arconada Rodríguez y Javier Ferreira
Ramos]