Fatigada
y somnolienta
camina una mujer
por una estrecha calle.
Viene de decir adiós,
de llorar bajo la sombra
oscura de un ciprés
y de dar brillo al mármol
que cubre la memoria
de una vieja amistad.
Sabe,
que lo peor
de la vida
está por llegar.
Pablo Casares, Tiempo muerto
Hace 1 hora