martes, agosto 23, 2016

Relatos de lo inesperado, de Roald Dahl


Éste es uno de tantos libros que compré hace años y que esperaban su turno en la biblioteca. La última (y maravillosa) película de Steven Spielberg, Mi amigo el gigante (The BFG), adapta un cuento infantil de Roald Dahl, y al salir del cine recordé que tenía por ahí este conjunto de relatos. ¿Qué puedo decir que no se haya dicho ya? Dahl era un maestro de la narrativa, da lo mismo que enfocara sus historias hacia los niños o hacia los adultos. Estos Relatos de lo inesperado inspiraron a muchos artistas y, sobre todo, a cineastas que adaptaron algunos de sus textos en películas o en series de televisión: por ejemplo, Alfred Hitchcock o Quentin Tarantino; sin olvidar que otras obras suyas fueron convertidas en grandes filmes por gente como Tim Burton, Danny DeVito o Wes Anderson.

El volumen recoge 16 relatos donde siempre hay un giro de 180 grados hacia el final, una vuelta de tuerca que lo cambia todo. No se puede contar mucho de cada uno porque la sorpresa es uno de los factores indispensables para sacudir al lector. Pero podemos dar unas pinceladas…

En "Gastrónomos", durante una cena y la correspondiente cata de vinos, un hombre quiere que otro se apueste con él la mano de su hija adolescente; a cambio, y si pierde, él le entregaría dos de sus casas.

En "Hombre del sur", quizá el más conocido porque ha sido adaptado tres veces al cine y a la televisión, un hombre hace otra apuesta con un cadete: si es capaz de encender su mechero diez veces seguidas, le entregará su Cadillac; pero si el muchacho pierde, el hombre le cortará uno de sus dedos.

"William y Mary" cuenta lo que ocurre tras la muerte de un hombre que había sometido y maltratado a su mujer, y la venganza que ella se cobra (bastante terrorífica) cuando él cede en su testamento su cuerpo para que lo revivan.

En "Jalea real", que yo juraría que adaptaron en algún cómic de EC, un hombre quiere alimentar a su bebé con jalea, pues se supone que con eso ganaría el peso que el niño, casi esquelético, ha perdido en los últimos días; el resultado, claro, podría ser monstruoso…

Es éste un libro de cuentos por donde proliferan las venganzas terribles, las apuestas más disparatadas, los personajes con doble cara más insólitos… No se lo pierdan, es un pequeño clásico y todos los relatos son magníficos. En septiembre, además, Anagrama lo reeditará en un volumen de cuentos: en su colección Compendium.


[Anagrama. Traducción de Carmelina Payá y Antonio Samons]