jueves, abril 16, 2015

Volver

A una casa vacía e inhóspita donde ya no viven tus padres. Donde las puertas chirrían y no cierran los postigos de las ventanas. Donde los objetos agotaron su utilidad. Donde es mejor dejarlo todo a la deriva, pasto del escombro. Volver. Y querer marchar cuanto antes. Y no sentir nostalgia alguna. Ni desearlo.


Pablo García Casado, García