Roman Polanski vuelve con fuerza en este thriller con toques de suspense a lo Hitchcock. La novela de Robert Harris sobre un "negro literario" (o "escritor fantasma", en inglés) que es contratado para terminar las memorias del primer ministro británico, le sirve de base para meternos poco a poco en una tela de araña de sospechas y misterios gracias a su narrativa clásica. Un amplio reparto de conocidos secundarios (Kim Cattrall, Tom Wilkinson, Olivia Williams, Eli Wallach, James Belushi, Timothy Hutton) apoya la labor de los dos protagonistas: Ewan McGregor y Pierce Brosnan están fantásticos en sus papeles. Ewan McGregor es el negro literario, el hombre que no debe dejar huella, y por eso el personaje se ajusta a esa categoría de “fantasma” del título original: nunca dicen su nombre, no tiene familia y suele dedicarse a echar una mano escribiendo las biografías de otras personas. Él debe sustituir al escritor que se encargaba de las memorias, un tipo que aparece muerto en extrañas circunstancias: nadie sabe si fue víctima de accidente, de un suicidio o de un asesinato. Pero toda la intriga gira alrededor de ese libro, demostrando una vez más lo eficaz que es el poder de la palabra.
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