Ya dije que defiendo la comedia americana de estos tiempos. No toda, desde luego. Pero sí esa línea humorística en la que aparecen nombres como Ben Stiller, Adam Sandler, Jim Carrey, Judd Apatow o Steve Carell. De Rob Schneider me quedo con sus cameos en las cintas de Sandler. Hace poco revisé “Zoolander” y volví a disfrutar de la parodia que hace Stiller del mundo de los modelos masculinos. También he visto por primera vez “El reportero: La leyenda de Ron Burgundy” y casi se me descoyunta la mandíbula cuando varias pandas de periodistas se pelean en las calles, al estilo de “West Side Story” y “La naranja mecánica”, porque además intervienen varios actores en apariciones sorpresa que aquí no voy a desvelar. Cada vez que anuncio que me gusta una de estas comedias, mucha gente me mira como si estuviera enfermo de la cabeza. Dije que me encantaron “Virgen a los cuarenta” y “Supersalidos”. Mis amigos me miraban como si hubiera perdido el norte. Algunos las han visto, por fin, y han reído y disfrutado. Una tarde, paseando por ahí, traté de contagiarle a uno de mis primos mi entusiasmo por la última de Ben Stiller, “Tropic Thunder”. Me dijo: “¿Una guerra muy perra? Con ese título no puedo ir a verla”. Bueno, ese es el título que “los cerebros” de la distribuidora española le han puesto, pero no tiene nada que ver con el original. Le animé a no perdérsela porque se trata de una parodia efectiva de Hollywood y del cine sobre la guerra de Vietnam.
Esta semana he encontrado un par de noticias que me confirman que, al menos, no he perdido el norte. “Supersalidos” (o “Superbad”) ha sido elegida mejor comedia adolescente de la historia por la prestigiosa web “Hollywood.com”. Yo hubiera preferido alguna otra en el primer puesto, y se me ocurre por ejemplo “El club de los cinco” o incluso la menos conocida “Dieciséis velas”, pero este ranking servirá para que quienes no hayan visto “Supersalidos” la rescaten ahora en dvd. Servirá para ponerla en uno de los lugares donde le corresponde. Porque esa comedia, aparte de ser ingeniosa y hacernos pasar un buen rato, tiene su máxima virtud en el retroceso: en que a mí me devuelve, como espectador, al tiempo en que era un adolescente con acné. Y en ese tiempo sólo había dos preocupaciones, dos obsesiones: las chicas y el alcohol. Otra de las noticias tiene que ver con “Tropic Thunder”. Compré el Fotogramas de noviembre y busqué, por curiosidad, en esa tabla donde los críticos puntúan las películas estrenadas. Arriba, en la cima, estaba “Tropic Thunder”. La más valorada por los críticos. Y es que este filme está por encima de la media. Entre otras cosas porque Ben Stiller está detrás de las cámaras (y delante). Y Stiller demostró su valía para la comedia en la mencionada “Zoolander”. Y su primer largometraje fue un bombazo de prensa y taquilla: “Reality Bites”. Película, por cierto, que no me entusiasmó en su día, pero que revisé hace un par de semanas y esta vez sí me gustó. Porque, vista desde otra óptica y años después, compruebo que representa a la perfección todas las señas de identidad de aquella famosa “Generación X”.
Pero “Supersalidos”, “Virgen a los cuarenta” o “Tropic Thunder” no tienen el respaldo de las nominaciones a los Oscar. Como sí sucedía con las respetables “Juno” y “Pequeña Miss Sunshine”. No son muy diferentes. Pero las primeras tienen un humor más gamberro, más descarado, menos políticamente correcto, y son numerosos los chistes sobre sexualidad. Algo que, supongo, espanta a los “miembros de la Academia”. Así que apunten estos títulos y traten de verlas. Pasarán un buen rato.