viernes, agosto 22, 2008

Te me moriste, de José Luís Peixoto


Tiene sólo 40 páginas y cuesta menos de 4 euros. Es un texto de prosa poética, traducido en España al igual que las novelas Nadie nos mira, Cementerio de pianos y Una casa en la oscuridad (esta última aparecerá en septiembre). Un texto que, como dice su traductor, Antonio Sáez Delgado, "vive en las orillas de los géneros". Es autobiográfico, poético y narrativo. Es el regreso del autor a la casa de su infancia tras la muerte de su padre. Cada rincón activa el recuerdo. Su promesa fue no olvidar al progenitor. Y no lo olvida. Porque la única manera de ahuyentar a la muerte es la memoria. Son 40 páginas estremecedoras y muy íntimas, pero jamás caen en la cursilería o en el sentimentalismo. Si lo encontráis en alguna librería, comprarlo. Os dejo con un fragmento:
Padre que nunca te vi tan vulnerable, mirada de niño asustado perdido pidiendo ayuda. Padre, mi hijo pequeño. Nosotros rodeándote, y tus gemidos lejanos en la verdad insoportable que te enterró allí, rodeándote, y nuestras lágrimas inútiles en el pánico, nosotros rodeándote y quitándote la chaqueta empapada de sangre, y mi madre envolviéndote el vientre con una toalla blanca y después roja. Y pasó mucho tiempo en nuestros rostros. Inmóviles, mientras esperábamos que la sangre se parase, sucedió como si nos hubiésemos abrazado. Fuimos juntos. Y mi madre, siempre cuidándote, con la punta húmeda de un paño, te lavó el vientre y la cicatriz. ¿Dónde has estado esta noche, padre? Te he buscado más allá de la memoria, en los rincones que sólo nosotros conocemos, y no te he visto. Sólo he visto, en la negrura de los rincones antes iluminados, la negrura de tu ausencia, el dolor sin fin que sólo se puede sentir. Te he buscado en los rincones de la noche.