Me habían recomendado un par de veces este libro y este verano me lo regaló una de mis tías. Tiene pocas páginas y está escrito bajo la forma epistolar, pero resulta genial la manera en que, a través de un puñado de cartas, nos cuentan tantas cosas: la pasión por los libros, el hambre después de la guerra, la soledad, el racionamiento de productos básicos, la familia, el contrapunto entre la cultura inglesa y la americana, el paso del tiempo y sus huellas, etcétera. En los ochenta vi la película basada en esta obra (la protagonizaban Anthony Hopkins y Anne Bancroft), La carta final, pero apenas la recuerdo. La novela se lee de una sentada y constituye una delicia para los lectores compulsivos.
Hace 14 horas