Los sueños rotos, los malos tragos, el tiempo perdido, los caminos que no escogimos, las vidas paralelas que pudimos vivir, la batalla y la derrota, la poesía como único refugio, la dificultad de mantenerse vivo y en pie, y también la rutina de los días configuran los poemas del último libro, espléndido, de Vicente Muñoz. Es el primero que leo, pero desde luego no será el último.
Hace 12 horas