jueves, diciembre 18, 2025

La tierra hundida ya vuelve a levantarse, de M. John Harrison

 

Ésta es una de las novelas más enigmáticas que he leído en los últimos tiempos. Su prosa es difícil de definir: articula unas frases insólitas que, a ratos, me recuerdan a J. G. Ballard, Don DeLillo e Iain Sinclair: ya sabéis, ese misterio, esa complejidad. 
La tierra hundida ya vuelve a levantarse carece de argumento como tal, en el sentido tradicional del término, y deja gran parte de lo que sucede a la imaginación del lector. Sigue a dos personajes (un hombre que ha estado deprimido y una mujer que busca un sentido a su vida) en entornos ingleses: trabajan, se mueven, se relacionan entre ellos y con otras personas, y de vez en cuando notan huellas y síntomas de algo confuso, algo que está cambiando, pero siempre relacionado con el agua: las lecturas (Los chicos del agua de Charles Kingsley es uno de los motores de la narración), los sucesos extraños que indican que podrían existir hombres-peces, la actitud anómala de algunos personajes... 
Nunca se nos explica nada, y los lectores y los protagonistas sabemos lo mismo, es decir, poco: falta información y debemos suplirla rellenando huecos mientras la historia recorre lugares industriales, pubs británicos post-Brexit, ríos y estanques y aguas estancadas, recovecos donde la naturaleza parece estar muriendo pero por debajo hay algo que insiste en resucitarla.  



[Editorial Sigilo. Traducción de Marcelo Cohen]