viernes, noviembre 07, 2025

El lenguaje de la lluvia: otros 2 poemas

 


vocación



te dirán que no es un trabajo
ni un “un empleo de verdad”
sólo 
una pérdida de tiempo
no se gana dinero ni tienes la sombra 
de un jefe revisando tus horarios
para ellos es un hobby menor
o un pasatiempo que podría 
desempeñar cualquiera

recalcarán
una y otra vez
una y otra vez:
no se gana dinero
no hay un sueldo fijo
te morirás de hambre…

pero escúchame con respeto:
si la escritura es tu pasión
y tu oxígeno en los días malos,
no abandones ni les escuches,
aunque deberás someterte
a la penuria y a la derrota,
al clavo y al fuego
y a la burla…
que no puedan contigo,
muchacho,
que no te venzan,
que no te dobleguen.  

**

un vaso de mosto



hubo una vez un hombre neerlandés 
que escribió con rabia contra todo: 
Thomas Bernhard
nacido en Heerlen el 9 de febrero 
de 1931, falleció 58 años después 
en la localidad austriaca en la que 
vivía desde 1965:
un 12 de febrero de 1989
hacia las 7 de la mañana
y con un vaso de mosto en la mano

los problemas cardiacos y pulmonares 
lo aplastaron durante media vida… 
el acoso implacable de una 
enfermedad lo condujo a sufrir 
un ataque al corazón: sarcoidosis 
él lo sabía y se lo comunicó 
a su editor, Siegfried Unseld

David González intuyó 
su propia muerte: 
y también se fue 
a los 58 años y en febrero 
y seguro que mi madre sospechaba 
la inminencia de su propio deceso

¿cuánta locura es capaz de 
soportar un ser humano 
al saber que sus pies 
están tanteando la tumba? 
¿cuánta entereza necesita 
un hombre o una mujer 
para afrontar que sus huellas 
pronto serán ceniza?