domingo, abril 25, 2021

Los equilibristas, de David González

 

 

Acaba de publicarse el nuevo poemario de David González. No se vende en librerías ni en internet. Pero hay dos formas de conseguirlo: comprándoselo a la editora (edicionesraro@yahoo.es) o escribiendo un privado al perfil de su autor en Instagram (@davidgonzalezpoeta). Aquí van unos poemas:  

 

EL HOMBRE DE LA CICATRIZ  EN EL OJO


nunca una palabra amable:
nunca una de ánimo o de consuelo:
nunca un gesto de aprobación:
nunca uno de respeto, admiración o reconocimiento;
nunca uno tampoco de buena voluntad:
nunca un guiño un apretón de manos o un abrazo sentido:
nunca un aplauso o un sentimiento de orgullo:

siempre la cicatriz en el ojo:

hablo
de mi viejo
de quién si no:

siempre la cicatriz en el ojo:

no sabes tú
se indigna mi madre
lo mucho que tu padre

te quiere:


menos mal
suspiro para mis adentros
no quiero ni pensar entonces en cómo sería

si me odiase:




lágrimas de sangre:
charles bukowski:


**

MONEDA


una moneda
ya sea de oro, plata, cobre u otro metal
ofrece siempre
como sabes
dos posibilidades:

la cara
y la cruz:

y eso es lo que vengo mostrando en mi literatura
sin cortarme ni con un cristal además
desde hace más de veinticinco años:

la cara
y la cruz:

las dos caras de mi vida:

las dos
en especial la que menos me favorece:

cuando tengo que pagar con ella
cuando tengo que pagar con esta moneda

prefiero mil veces que nadie la acepte
a que me la devuelvan

por falsa:




con las muescas de los años:
serguei esenin:


**

LOS EQUILIBRISTAS


con un pie en el aire
inclinada hacia delante
Héléna
en precario equilibrio
en el noveno peldaño
de una escalera de doce

se esmera en aplicar
cinta selladora autoadhesiva
sobre el vapuleado techo
de nuestra casa en movimiento:

y mientras tanto
mis fuertes y enamoradas manos
cargan con la responsabilidad
de tener que sujetarle
la escalera en movimiento:

luego nos turnamos
y soy yo
el que guarda el equilibrio
y ella
la que me guarda a mí:

en el noveno peldaño
de una escalera de doce
siempre en precario equilibrio

el amor

con un pie en el aire:




yo oprimo mi corazón:
francis scott fitzgerald:


**

LA SED


te espero:
te sigo esperando:
te esperaré siempre:

como la sed

al agua fresca:



siento su ausencia:
Zelda Fitzgerald:



[Ediciones RaRo]