¿Cuántos recuerdos caben en una maleta? ¿Pueden sus reducidas dimensiones albergar todo nuestro pasado? De este libro he hablado un poco en el último artículo, de modo que no me extenderé mucho. Pero me gustaría apuntar que Dovlátov es un autor que no debería pasar desapercibido. Su prosa es contundente, como el vodka que aquel escritor bebía en cantidades industriales antes de morir. Los objetos que ha guardado en la maleta para viajar a Estados Unidos y asentarse allí resumen su vida. Cada prenda va asociada a un recuerdo (sus tiempos como pequeño delincuente, su matrimonio, su estancia en el ejército, su mejor amigo de la infancia, etc). Cada recuerdo constituye un relato. Cada relato simboliza algo: el amor, al amistad, el trabajo... Un libro que acaba con esta frase: Existe una razón para que cada libro, hasta los que no son muy serios, tenga la forma de una maleta.