jueves, noviembre 15, 2012

El profesor (Detachment)



En la novela Moo Pak, de Gabriel Josipovici, uno de los dos personajes dice, refiriéndose a la docencia y a la época en que enseñaba literatura a sus alumnos: Durante mucho tiempo, dijo, traté de ir a mi aire y enseñarles los valores en los que yo creía, pero llega un momento en que uno se da cuenta de que es una guerra perdida. Puedes imponerte en una refriega aquí o incluso en una batalla allá, pero nunca ganarás la guerra. Todo lo anterior serviría para resumir esta película, el nuevo trabajo de ficción de Tony Kaye, muchos años después del primero, la espléndida American History X. En Detachment (olvidemos el ridículo título español) se parte de una frase de Albert Camus sobre la indiferencia o el desprendimiento para contarnos el desaliento y la falta de esperanza de un grupo de profesores de una escuela de Estados Unidos. Chavales que no prestan atención, que están aburridos, que plantan cara, que pasan de todo... Que no están motivados. 

Adrien Brody (por fin regresando a un papel a la altura de su talento) interpreta a un profesor sustituto que, durante un tiempo brevísimo, va a tratar de inculcarles algo de pasión por la literatura. Lo interesante de la película es que no se queda en eso, sino que va más allá: a través de las palabras del personaje de Brody el espectador ve cómo todo el mundo sufre y tiene que cargar con un montón de neuras, complejos y problemas personales: profesores, alumnos, padres, madres... Cuando sale del aula, Brody es un tipo jodido, al que atormentan su pasado y el ingreso de su abuelo en un hospital. Un día se topa con una prostituta jovencísima y tratará de ayudarla. Pero sabe que se trata de una batalla, no de la guerra: aunque ayude a una persona, quizá eso no signifique nada.

Decía antes que es la segunda película de Kaye. Desde American... ha seguido rodando, pero sólo documentales, que por desgracia no se han estrenado en España. Con Detachment vemos que sigue en plena forma, que todavía sabe meter el dedo en la llaga, que se sirve de un montón de planos (en color, en blanco y negro) que incluyen dibujos y esbozos y fotografías. Kaye es un tipo al que le preocupa la sociedad, como demuestra en estas dos películas. Un director que sabe profundizar. Y que, además de su protagonista, ha fichado a secundarios de lujo: James Caan, Lucy Liu, Blythe Danner, Marcia Gay Harden, William Petersen, Christina Hendricks, Tim Blake Nelson y Bryan Cranston. No me parece tan lograda ni tan impactante como American History X, pero es un filme que hay que ver. Una buena película.