pensad en ella:
una cholita,
de unos treinta,
de ascendencia vasca,
iribarren,
fabrica
jabones
con agua de plata,
agua de lluvia,
esencias
y una planta
que crece
sin que nadie la siembre.
fabrica
jabones
que luego vendemos
en el mercado de trueque.
porque no hay trabajo hace mucho tiempo
y comer
es muy complicado:
un paquete de arroz
cuesta lo mismo
que un par de zapatos nuevos.
por eso todo el mundo quiere irse.
por eso y porque la represión policial es brutal.
así que pensad en ella, pendejos,
pensad en laura
la próxima vez
que os lavéis
las manos.
David González, Poemas para cruzar el desierto